Rompe con la monotonía y atrévete a cambiar las reglas en tus encuentros sexuales. Anímate a jugar con tu pareja y a encender la llama de la pasión
No es de extrañarse que después de pasar mucho tiempo en una relación de pareja el sexo deje de ser ardiente y se vuelva monótono y rutinario. Si quieres lograr que los encuentros sexuales con tu pareja vuelvan a ser excitantes los juegos de rol pueden convertirse en parte de su repertorio sexual.
Si quieres llevar el sexo al siguiente nivel los juegos de rol pueden hacer que las sábanas prendan fuego.
Los juegos de rol son más que un juego ya que con ellos se despertarán tus deseos más profundos al igual que los de tu pareja, de manera que terminarán conociéndose mejor y la intimidad en la relación crecerá.
Los juegos de rol permiten aumentar la excitación sexual porque te permiten seducir a tu pareja de formas en las que ninguno de los dos hubiera imaginado. Básicamente este tipo de práctica implica seducción y emoción.
¿Por dónde empezar?
Tu pareja y tú interpretarán diferentes personajes y adoptarán la personalidad del papel que elijan. Es decir, que si quieres ser una enfermera, es importante que te vistas como el personajes y que “adoptes” la personalidad. Lo mismo pasa con tu pareja, si él va a ser el paciente, deberá comportarse y vestirse como tal.
Generalmente los encuentros sexuales suceden sin ninguna preparación y planificación. Con los juegos de rol pasa todo lo contrario. Alguno de los dos deberá establecer el ritmo del juego hasta terminar en el sexo.
Es importante que antes de empezar a jugar se establezcan las reglas para no transgredir a la pareja. Si a ti no te gusta el sexo anal, debe quedar establecido desde el principio para que no sucedan sorpresas desagradables. También es fundamental que elijan una palabra clave para parar el juego, como por ejemplo la palabra “manzana”, de esa forma si alguno de los dos la dice el otro sabrá que algo en el juego no está funcionando y deberá parar.
Lo más importante para jugar con tu pareja es que ambos platiquen qué es lo que les excita, cuáles son sus fantasías y deseos sexuales, para que de esa forma puedan llegar a un acuerdo y establezcan el escenario ideal.
No empiecen un juego de rol hasta que ambos se sienta cómodos, confiados y relajados para llevar a cabo la interpretación de sus personajes, que finalmente terminará en sexo.
Atrévete a romper las reglas en la alcoba y anímate a encender la llama… ¿Te animas a jugar con tu pareja?
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