Consejos para seducir a tu pareja a través de los 5 sentidos

Cada uno de tus sentidos tiene una misión diferente en tu vida, pero cuando logras unirlos y aprovecharlos al máximo en la cama, logras volver loca de placer a tu pareja. ¡Anímate a probar estos tips!

Si el ser humano tiene 5 sentidos, ¿por qué no aprovecharlos todos para disfrutar al máximo? Por ejemplo, cuando tengas relaciones íntimas con tu pareja, puedes intentar centrarte en cada uno de ellos por separado para experimentar el sexo desde otra perspectiva. Para eso te damos estos consejos:

La vista. Sin duda es uno de los sentidos más importantes ya que a través de los ojos entran en tu cuerpo infinitas sensaciones. Para los hombres es el sentido más eficaz pues logran entrar en calor mirando películas, revistas o fotos subidas de tono. También miran mucho las curvas del cuerpo femenino. Si tu hombre es muy mirón proponle filmar un video casero o sacarse algunas fotitos hot.

El gusto. Con la boca se pueden activar las zonas más erógenas de tu cerebro. Los labios son una de las zonas más sensibles de tu cuerpo y puedes estimular con besos o el roce de los dedos. Además, muchos alimentos, como el chocolate o las fresas, producen un aumento de tu deseo sexual, sobre todo si las comes encima del cuerpo de tu pareja.

El olfato. En los momentos candentes es cuando mejor hueles a tu pareja porque se activan las feromonas y estas, de manera instintiva, aumentan tu deseo sexual. Además, utiliza velas, incienso o cualquier otro aroma que te guste para crear un buen ambiente.

El oído. Es un sentido muy importante cuando se tienen relaciones. Las palabras románticas o incluso obscenas, escuchar los suspiros de tu pareja al eyacular o el grito de tu orgasmo, son los sonidos que más fácilmente recuerdas cuando quieres excitarte. También puedes incentivar el ambiente con música romántica y suave.

El tacto. Es el sentido que más se utiliza para conocer a fondo cómo es tu pareja porque toda la piel es una gran zona erógena. Pueden empezar con un masaje relajante en la espalda, que a los pocos minutos se convertirá en un masaje erótico. Estate atenta a la expresión de tu chico y cómo va cambiando de acuerdo al lugar donde lo acaricies.